¡¡¡puchas el gato pa'narigon!!!...oiga tia, aprovecho de saludarla y contarle que dejé botado a su bulto en la punta del cerro...me imagino que el pobre debe estar feliz que no esté, espartanamente, molestandolo. Saludos p'al joaco.
Es lindo el Martín y le encanta que se lo digan. Es más, un amigo de mi hermano que siempre venía y odiaba los gatos jamás le dio pelota, por más que el Martín se paseaba frente a sus ojos. Cuando el gallo se iba, sin haberle pegado ni un solo vistazo a mi niño, él se deprimía y yo tenía que consolarlo como una hora para que se le pasara su pena gatuna.
Simplemente hermoso, es todo un monarca. Se le nota la nobleza y magestad en su mirada celeste y profunda. Es siamés, esos gatos la llevan, son líderes por naturaleza.
Soy varias cosas y de distintas maneras pero si me lees, creo que podrías entenderme mejor que yo misma. En cualquier caso, si me entiendes o no tampoco importa demasiado.
Ay, por favor! Los gatitos, aunque pesen mucho, son un amor ^.^
ResponderBorrarSegún mi hermano "Un gatito obeso es un gatito feliz". (aunque desde el punto de vista médico no sea lo óptimo)
ResponderBorrar¡¡¡puchas el gato pa'narigon!!!...oiga tia, aprovecho de saludarla y contarle que dejé botado a su bulto en la punta del cerro...me imagino que el pobre debe estar feliz que no esté, espartanamente, molestandolo.
ResponderBorrarSaludos p'al joaco.
En realidad, no es tan narigón. Puse esa foto y no otra porque la encuentro divertida
ResponderBorrarOiga, y Ud. ¿por qué anda camuflada? ¿o cambió de nombre?
Acabo de ir a verla a su peni y ya no está ¿Dónde andarán penando las penas?
ResponderBorrarQue mirada más intensa.
ResponderBorrarHermoso.
Rabinsensato
Es lindo el Martín y le encanta que se lo digan. Es más, un amigo de mi hermano que siempre venía y odiaba los gatos jamás le dio pelota, por más que el Martín se paseaba frente a sus ojos. Cuando el gallo se iba, sin haberle pegado ni un solo vistazo a mi niño, él se deprimía y yo tenía que consolarlo como una hora para que se le pasara su pena gatuna.
ResponderBorrarya me quisiera sus ojitos....
ResponderBorrarlos míos o los de Martín??? jejejeje
ResponderBorrar(es el colmo...coqueteando con los anónimos...)
Simplemente hermoso, es todo un monarca. Se le nota la nobleza y magestad en su mirada celeste y profunda.
ResponderBorrarEs siamés, esos gatos la llevan, son líderes por naturaleza.
Ñeña: ¿Cierto que sí? Otra de las gracias de la raza es que son enfermos de cariñosos y regalones (aunque con celos descontrolados)
ResponderBorrartremenda nariz!!!
ResponderBorrarOhhhhh que lindo....... hermosísimo.......
ResponderBorrarLa mirada uffffff entre dormido, remolón..... precioso.....
(los que lo encontraron libidinoso, se están proyectando, obvio).
Quisiera los ojitos de ambos...para que quedarse corto...ja,ja,ja
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